Un Magnifico Compendio de Obras en la Exposición “Tesoros del Arte Cristiano”

Por Rosalinda Zuarth Herrera

Con grandes expectativas la Universidad Autónoma de Guadalajara alberga en sus instalaciones un verdadero privilegio artístico, la exposición “Tesoros del Arte Cristiano”. Ubicada en el Centro de Profesores y Egresados de Ciudad Universitaria, esta exposición es una muestra magnifica del arte cristiano que se conserva en diferentes conventos, monasterios, iglesias y colecciones privadas en el estado de Jalisco y que la UAG presenta al público en general.

Para conmemorar la primera ocasión en que esta sala abre sus puertas y muestra este magnífico compendio de obras, se llevó a cabo el tradicional corte de listón encabezado por el Señor Cardenal Juan Sandoval Iñiguez, quien expresó su profundo agradecimiento a la UAG por mostrar a la sociedad estos tesoros religiosos. Le acompañaron también en esta apertura el Lic. Antonio Leaño Álvarez del Castillo, Rector de la UAG; la Sra. Sandra Salmo, cónsul general de Estados Unidos en Guadalajara, entre otros distinguidos invitados, quienes abrieron paso al recorrido que bajo la explicación del Lic. Héctor Antonio Martínez, curador de la exposición, que fue describiendo una a una las características y origen de la obras.

Con piezas que datan de los siglos XVI al XX, esta espléndida muestra de verdadero arte sacro cuenta con más de 90 pinturas, esculturas, Custodias, Cáliz, Mitras y Misales antiguos, etc., de renombrados autores como Miguel Cabrera, José de Páez, Nicolás Enríquez, Francisco de León, entre otros.

En esta exposición, montada bajo la dirección museográfica de la Lic. María Inés Torres de Toscano, se pueden apreciar obras como un Cáliz barroco italiano de la primera mitad del siglo XX, “El Salvador del mundo” de Nicolás Enríquez, perteneciente a la segunda mitad del siglo XVIII; un San Francisco de Asís proveniente de Guatemala del siglo XVII; un icono ruso del siglo XVII que se ha conservado en un excelente estado, el Cáliz de plata dorada que perteneció al Arzobispo de Puebla Francisco Meliton Vargas, entre otras obras de igual importancia y antigüedad.

Destaca entre las piezas el Cristo de marfil agonizando en la cruz con malaquita y cantonera de esmaltes de los cuatro evangelistas que se encuentra sostenido por una base barroca, con angelitos, querubines y uvas, que data de la primera mitad del siglo XX, además de su esplendor artístico contiene una reliquia de la Cruz de Nuestro Señor, lo que la convierte en un verdadero tesoro religioso.

Una de las pretensiones de esta exposición es producir en nuestras autoridades Eclesiásticas, estatales y municipales, el propósito de crear un museo donde se pueda tener en exhibición estas obras, para que todo el público pueda apreciar esta exquisita muestra de arte y no se queden olvidadas en las colecciones privadas, vendidas al extranjero o guardadas en bóvedas remotas.

A su vez, se pretende homenajear a estos grandes artistas del pasado, que con su talento sin precedentes, dejaron una huella firme e imborrable en el arte cristiano, para gozo y deleite del público, que por primera vez tiene la oportunidad de observar en conjunto estas obras de arte.

Asimismo esta exposición espera inspirar a las nuevas generaciones artísticas a tomar como ejemplo y guía estos pintores y escultores y sus obras, que están basadas e inspiradas por el mas sublime Creador, Dios. Y a su vez detener el decaimiento artístico que ha sufrido nuestra sociedad desde hace ya varios siglos, cuando el arte se convirtió en antropomorfo y narcisista y restaurar las principales pautas de la estética artística que son la belleza y la verdad.

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